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PUNTADA CON HILO, COMUNICACIÓN DE MUJERES, fue un periódico en papel que circuló en los años '90. Nos definimos feministas y "con perspectiva de clase".

Salíamos mensualmente en todo chile, también llegábamos a otros países latinoamericanos. A organizaciones de base, tanto de mujeres como mixtas, llegábamos sin costo alguno o hacíamos un trato: una sola suscripción a cambio de varios ejemplares cada mes. Las ONGs e instituciones en cambio debían pagar sus suscripciones completas.

PUNTADA CON HILO se destacaba por un lenguaje directo, cercano, claro y por manejar como sus fuentes primarias los testimonios de las propias mujeres, sus experiencias, sus formas de evaluar los acontecimientos políticos y sociales, sus denuncias, sus ideas y elaboraciones políticas y culturales. Las "autoridades" en diversas materias, no pasaban de ser un apoyo secundario -tal como las estadísticas e informes oficiales-.

Denunciamos la falsedad de la llamada "vuelta a la democracia", las manipulaciones de los partidos políticos, rechazamos la instrumentalización de la lucha popular que hicieron -y hacen- la mayoría de las ONGs e instituciones -con honrosas excepciones-. Destacamos el feminismo popular, la mirada de clase y nos esforzamos por no caer en la sobreideología que daña -desde nuestra perspectiva- las luchas sociales. Hablamos mucho desde lo íntimo y desde los procesos que hacemos las mujeres en lo personal que es lo que realmente -estamos seguras- construye lo político cuando hay organización.

viernes, 16 de marzo de 2018

MEMORIA, CLASE Y AUTONOMÍA




Taller para el debate colectivo desde el territorio
Facilitadora: victoria aldunate morales

Primera Sesión: Anarquistas, UXP, postdictadura

  

Reflexiones para este taller: Ni estructurado ni académico (he vivido tras la cortina de hierro sin computadoras ni tecnología, y en medio de lógicas campesinas y provincianas como las de Rusia, Mendoza, Santiago y Puerto Montt…). Nada neutral ni objetivo.

Propongo descubrir, reflexionar, debatir sobre algunos hitos nada “ciudadanos” y tremendamente revolucionarios, aunque ese concepto esté apropiado por la masculinidad, sus privilegios de clase masculina y por el Socialismo Real (su representante), y sea mirado en menos por las nuevas generaciones renovadas, tan queer, y últimamente muy esencialistas.


1. Obreras anarquistas feministas en el territorio
Relación y sentido de hitos obreros feministas anarquistas y contexto político, económico, social en chile. Monjas y anticlericalismo – infancia abandonada – mujeres organizadas revolucionariamente y desencanto del feminismo obrero.

2. ¿Feminismo en tiempos de Allende?: Entrevista a Marta R.
Zabaleta del Frente de Mujeres Revolucionarias del MIR chileno, años 70 “NO ME ARREPIENTO DE NADA”, IMPORTANTE LEERLA, pueden hacerlo en: http://nuestrahistoriaenlapuntada.blogspot.cl/2015/11/feminista-de-los-anos-70-en-chile-marta.html, o en: http://www.g80.cl/noticias/columna_completa.php?varid=9579

3. Post-dictadura y elementos de feminismos chilenos.
Algunos documentos, manifiestos, declaraciones, de lesbianas y autónomas, lesbianas y La Morada; conflicto mapuche y jueza lesbiana. (Documentos recopilados de manera desordenada y desestructurada). 

METODOLOGÍAS
Ejercicios de contacto - Exposición datos, imágenes - Preguntas, reflexiones, aportes: se desarrollan preguntas y/o temáticas para el trabajo en grupo/grupos/ desde la asamblea - Trabajo de grupos - Exposición grupos.

TIEMPO TOTAL: 3 HORAS A 3 HORAS Y MEDIA


CUÁNDO: DOMINGO 18 DE MARZO
A QUÉ HORA: 16:30 HORAS
DÓNDE: LIBRERÍA FEMINISMOS, CALLE MAIPÚ 349, BARRIO YUNGAY
APORTE VOLUNTARIO

I

Me manifiesto (mi manifiesto): Soy lesbiana feminista antirracista. Nieta de una católica, artista y sabia, hija de una luchadora comunista, madre de una hija a la que no me corresponde definir (a las madres y las abuelas no les molesta). He abortado dos veces. También hija de un comunista, intelectual pobre, pragmático, parte de los wachos abandonados (y mejor así), por la clase criolla chilena.

Me defino activista, terapeuta y escritora, esos son mis oficios. Me he ocupado de entrevistar a mujeres que hacen política feminista, de escuchar testimonios de mujeres desde sus vivencias de clase, género y raza; he escrito sus testimonios y los míos. He vivenciado política feminista, de clase y antirracista, y tengo sentimientos que preceden a esas prácticas y que son los que, fundamentalmente, movilizan mi activismo autónomo, de clase, lesbiano y antirracista.

Fui una presa política adolescente en la Dictadura. Fui militante de una juventud política (JJCC) y –felizmente- renuncié a ella en la URSS, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Me hice feminista autónoma por elección política y renuncié a un Movimiento llamado Movimiento Feminista Autónomo en Santiago; me fui a Puerto Montt, volví y me hice parte de Memoria Feminista, feministas autónomas. Me hice lesbiana política y lesbiana. Me fui al feminismo comunitario de Bolivia imaginando que era la revolución perdida para y por las mujeres de los suburbios como yo, pero también escapé de ahí… (debo ser justa y decir que me reconcilié con el Feminismo Comunitario Antipatriarcal hace muy poco y eso me alegra).

Me gano la vida como asalariada (lo que siempre he sido), haciendo terapias en una Comunidad Terapéutica en la Pintana, un suburbio urbano y suburbano de la capital empobrecida forjado por la narcodictadura pinochetista. Nací desde la conciencia de clase que es la que de verdad me sostiene con sentido de dignidad.



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