PAGINA EN CONSTRUCCIÓN...

PUNTADA CON HILO, COMUNICACIÓN DE MUJERES, fue un periódico en papel que circuló en los años '90. Nos definimos feministas y "con perspectiva de clase".

Salíamos mensualmente en todo chile, también llegábamos a otros países latinoamericanos. A organizaciones de base, tanto de mujeres como mixtas, llegábamos sin costo alguno o hacíamos un trato: una sola suscripción a cambio de varios ejemplares cada mes. Las ONGs e instituciones en cambio debían pagar sus suscripciones completas.

PUNTADA CON HILO se destacaba por un lenguaje directo, cercano, claro y por manejar como sus fuentes primarias los testimonios de las propias mujeres, sus experiencias, sus formas de evaluar los acontecimientos políticos y sociales, sus denuncias, sus ideas y elaboraciones políticas y culturales. Las "autoridades" en diversas materias, no pasaban de ser un apoyo secundario -tal como las estadísticas e informes oficiales-.

Denunciamos la falsedad de la llamada "vuelta a la democracia", las manipulaciones de los partidos políticos, rechazamos la instrumentalización de la lucha popular que hicieron -y hacen- la mayoría de las ONGs e instituciones -con honrosas excepciones-. Destacamos el feminismo popular, la mirada de clase y nos esforzamos por no caer en la sobreideología que daña -desde nuestra perspectiva- las luchas sociales. Hablamos mucho desde lo íntimo y desde los procesos que hacemos las mujeres en lo personal que es lo que realmente -estamos seguras- construye lo político cuando hay organización.

jueves, 18 de febrero de 2016

REFORMAS LABORALES PARA LOS PATRONES?

La Reforma Laboral de la “Nueva Mayoría”
Anomalías que anulan el discurso sobre potenciar la gestión de los sindicatos.
X MANUEL AHUMADA LILLO/Presidente C.G.T./ PULSO SINDICAL Nº 304- 305 ENERO 2016
Respecto de las reformas:
1.- Se hizo todo un trabajo de comunicaciones desde el gobierno y los partidos que lo sostienen, para trasmitir a la opinión pública que las reformas laborales apuntaban a mejorar sustancialmente la situación de los trabajadores.
Esto fue complementado con la aceptación de las mismas reformas por parte del único actor que el modelo reconoce como representativo de los trabajadores, la CUT, quienes llegaron a decir - en una frase que hasta el día de hoy deben lamentar - que estas reformas “ponían término al Plan Laboral de la dictadura”.
La guinda de la torta para convencer a los más reticentes, fue decir que eran tan buenas las reformas que hasta los patrones estaban en contra de ellas.

¿Que tenemos en este año trascurrido desde que se presentó el proyecto de reformas?
Un discurso gubernamental apoyado por el sindicalismo obsecuente  apuntando a instalar en las mentes trabajadoras la idea que estas reformas van en la dirección correcta al mejorar la organización y el poder de negociación, discurso que es anulado por antecedentes  indesmentibles.
Actualmente en mas del 90% de las empresas chilenas es difícil o simplemente imposible organizarse y negociar.
A esto se debe agregar la opinión de algunos senadores de la Nueva Mayoría y varios diputados, convencidos de que hay que dar garantías especiales a la PYMES, cuando es precisamente en este sector donde se presentan los mayores problemas, en cuanto abuso y persecución a quienes buscan organizarse.
Estos antecedentes, que pusimos como organización sindical en la discusión desde la aparición del proyecto de ley, y que muchos han calificado de catastrofista son ratificados por la ENCLA 2014 que entrega la Dirección del Trabajo, y que dan cuenta que en el 86% de las empresas nunca ha habido sindicato


2.- Las principales ideas - fuerza del proyecto de ley, se anulan durante la discusión.
a) No habrá mas y mejores condiciones para la negociación colectiva, toda vez que todos aquellos sindicatos que negociaron y que volverán a hacerlo post – reformas, deberán hacer frente no solo a la permanente campaña del empleador por destruir la organización sindical y que implica perdida de socios por campañas antisindicales que nadie sanciona, sino que también deberán contar con los quórum mínimos exigidos para la constitución de un sindicato, de otra manera estarán IMPEDIDOS de negociar colectivamente en forma reglada (Articulo 328 del proyecto de reformas laborales).
La cuestión podría ponerse aún mas grave para la organización sindical, de prosperar una indicación del Senado que, aunque ratifica el principio de que los trabajadores se mantendrán afectos a la negociación colectiva una vez hecha la presentación del proyecto, podrán dejar de estarlo si es que renuncian al sindicato para lo cual solo deben enviar una carta certificada a la directiva sindical, con copia a la Inspección y a la empresa, lo que hasta ahora no estaba permitido (articulo 324 del proyecto de reforma)
           
b)No se instala “el piso” como un elemento efectivo de la negociación entre partes, toda vez que la reforma mantiene los principios vigentes, esto es negar a los trabajadores la posibilidad de mantener lo acordado con la empresa en la anterior negociación colectiva (articulo338 del proyecto).
c) No es totalmente cierto que solo la afiliación sindical permitirá acceder a los beneficios del instrumento colectivo suscrito entre empresa y sindicato, ya que una indicación incorporada en el Senado dice que, si la empresa incorpora en su respuesta al proyecto presentado por los trabajadores las cláusulas  pactadas de reajuste de remuneraciones según IPC, podrá aplicarla a todos  sean o no parte del contrato colectivo, sin que se debe pagar extensión de beneficios por esto.
Hasta ahora la sola extensión de este reajuste daba lugar a reclamar por “extensión de beneficios” (articulo 323 de proyecto de reformas).
Para nadie es un secreto que la presión patronal puede frenar la afiliación post – negociación, ofreciendo este reajuste y otro tipo de compensaciones a condición de que nadie entre al sindicato, sin obviar por cierto el temor hasta hora existente de los trabajadores a ser parte de la  organización Y no debemos perder de vista que sigue vigente la posibilidad de constitución de sindicatos pro – empresa.
 Estas son solo algunas joyitas de la reforma, en el próximo Pulso veremos otras. Nadie podrá decir que no sabía lo que tramaron los detentadores del poder, nadie podrá alegar ignorancia. Solo queda ponerse a trabajar para anular con gestión sindical una mala ley.
Es bueno y ayuda a la discusión entre los trabajadores que sigamos viendo normas que retrotraen derechos, pero asimismo debemos insistir con firmeza en que el camino hasta ahora escogido por parte del movimiento sindical organizado no es el que corresponde a las urgencias que se viven. 
Por algo tenemos lo que tenemos, cuando se habla de propuestas para “mejorar las condiciones de los trabajadores”. Ya algunos han dicho que solo damos cuenta parcial de las cosas, me han preguntado incluso por lo bueno de las reformas. Reitero que eso que llaman bueno es tan menor en relación con lo que nos friega que ya vendrán los defensores de la reforma a hacer su pega. Nosotros pretendemos seguir clarificando algunas cosas a nuestros compas en la dirigencia y la militancia sindical.
Otras sorpresas de la reforma son:

3.- Ni siquiera el piso rasca se respetará siempre: Así lo dice la reforma, cuando establece que las partes podrán (como si negociaran en condiciones de igualdad) convenir rebajar el piso de la negociación a que se refiere el articulo 338 (de la reforma) cuando las condiciones económicas de la empresa así lo justifiquen (Articulo 343 de la reforma).
Esta condición aplica incluso cuando los trabajadores optaran por suscribir un contrato colectivo sujeto a las estipulaciones del piso de la negociación. (O sea, cometen el descaro de decir que se asegura un piso para a, reglón seguido, establecer en mecanismo para saltarse dicho aseguramiento) (Articulo 344 de la reforma).



4.- La huelga que continua siendo poco clara. La reforma garantiza el derecho a huelga, de quienes están negociando, por lo que se prohíbe el reemplazo de los puestos de trabajo de los trabajadores en huelga. No obstante los trabajadores deberán denunciar la presencia de los rompehuelgas para que la Inspección requiera el retiro inmediato de los reemplazantes de los puestos de trabajo en huelga. Si el empleador se niega, cosa que hace muy a menudo, la Inspección debe denunciarlo al Juzgado de letras del Trabajo y será el tribunal el que ordene el retiro de los reemplazantes (Articulo 347 de la Reforma).
Hoy en día esta norma está vigente y pasan varios días, incluso semanas antes de que dicho retiro se produzca. Conclusión, la huelga es un fracaso.
Este es el gran avance del que tanto se jactan, en lo que al derecho a huelga se refiere?

5.- La seguidilla de ofertas con huelga en curso que solo busca minar la confianza de los huelguistas: Durante el desarrollo de la huelga la empresa podrá presentar nuevas ofertas las que deberán ser votadas ante ministro de fe. Si es rechazada esta oferta puede ser presentada una nueva cada 5 días después de transcurrida la votación de la ultima. Que se busca con esto?. Nada más que presionar a los trabajadores y su organización. Esta también es una indicación ingresada en el Senado (articulo 357 de la Reforma. 

6.- La suspensión de la huelga, otra estupidez sin explicación: En lo que mas perece un chiste cruel que una norma legal, la nueva reforma plantea que las partes podrán acordar la suspensión temporal de la huelga por el plazo que estimen pertinente (Articulo 358 de la Reforma).
O sea, no solo se imponen un proceso dilatorio para sacar a los rompehuelgas y se faculta al empleador para presentar nuevas ofertas que pueden ser las mismas todo el tiempo, sino que también se legisla para que las partes (otra vez este cantito como si habláramos de partes con cierta igualdad de derechos) puedan SUSPENDER la huelga. Con que fin?. Solo servirá para que el patrón ofrezca estudiar una nueva oferta, saque la producción detenida a la venta y luego retome la huelga, sin resultado alguno para los trabajadores.

7.- Los propios trabajadores deberán resolver entre ellos quien trabaja mientras los demás están en huelga:  El proyecto da una larga lata con la calificación de los servicios mínimos  y equipos de emergencia, que deberán actuar en caso de huelga. Se trata de que los propios trabajadores resolverán quienes de ellos siguen trabajando si la empresa determina que requiere de tales o cuales posiciones para asegurar el funcionamiento de la empresa. Se remunerará a quienes cumplan estas funciones, hay plazos para que la empresa los solicite, los trabajadores se deben pronunciar y si no hay acuerdo puede suspenderse el proceso hasta que resuelva el tribunal (Artículos 360 y 361 de la Reforma).
¿Bonita manera de asegurar el derecho a huelga en negociación colectiva, cierto?

Hasta aquí llegamos en este Pulso con un vistazo a las reformas, socializarlo es la tarea de cada sindicalista con sentido de clase.
El sistema continuará imponiendo sus criterios si los organizados no damos con alguna forma o instrumento que nos lleve a enfrentarlo con algo mas que declaraciones, marchas y una que otra acción audaz.
Ya deben estar claros aquellos que apuestan solamente al lobby en el parlamento y los distintos ministerios, que ese es un camino perdido.
Lo que sale para ser discutido desde las oficinas palaciegas, es aquello que ya acordaron los que la llevan.

Los dueños del poder no van a poner en discusión ninguna norma que les quite espacios o les limite en su actuar. Ellos tienen claro lo que quieren desde antes de exponerlo. Solo buscan a las organizaciones y sus dirigentes para darle un barniz de participación al engendro que parieron.
Son muchos los que dicen estar en contra de este modelo de gestión, y sin embargo el sistema ha ido instalando cada una de sus leyes y las organizaciones sindicales siguen sin dar pie con bola.
No cabe duda que las Centrales Sindicales han dejado la grande. Que la dependencia de los partidos ha hecho de su actuar algo anodino, sin mas marca que un desprestigio que se extiende como una mancha imposible de quitar. Pero solo ellas son responsables?.

Ciertamente no y ya es hora de que vamos poniendo las cosas en su lugar.
No podemos ni debemos esperar nada de las Centrales. Solo lo que hagamos o dejemos de hacer marcará el presente y el futuro de la organización sindical. Por lo tanto no podemos ocupar sus mismos esquemas de gestión para llegar a los trabajadores.
Las reformas laborales saldrán según acuerden las mayorías representadas en el Parlamento y serán aplicables a todos los trabajadores, ya sea que se digan de gobierno u oposición, se califiquen de apolíticos o cierren filas en algo más radical.

La tarea entonces es desmenuzar lo que buscan y desde ahí construir el dique que al menos frene esta ofensiva del capital.


Para nosotros eso es el Pliego de los Trabajadores y se hace perentoria la construcción de un  proyecto colectivo tipo, que resguarde los derechos que serán atacados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario